Para nadie es un misterio -o una soberana exageración- decir que Los Jaivas son uno de los principales grupos de rock en Chile. Su trayectoria, su historia de vida, sus músicos y su legado, así lo demuestran. Por lo mismo, no es ajeno que el Día del Rock Chileno se conmemore gracias a la primera presentación del grupo de Viña del Mar en el año 1963.
Un 15 de agosto, en plena década del sesenta, con otra vestimenta y otro perfil, el grupo, llamados en ese entonces como The High & Bass, tocaron por primera vez como conjunto. En nuestro país, desde 2019, que se festeja esta fecha musical. Pero la historia del rock en Chile tiene un antes y un después de Los Jaivas.
El grupo nacional, a lo largo de su vida, ha pasado por grandes momentos, pero también por situaciones absolutamente desgarradoras. Lo más negativo fueron las partidas tempraneras de dos de sus integrantes: Gabriel Parra y Eduardo “Gato” Alquinta. Por lo mismo, hace pocos días la banda lanzó, por primera vez en vinilo, el álbum conocido como La Bota, que resume su acontecida gira de 1988 por Chile.
La misma marcó el último momento del baterista Gabriel Parra sobre los escenarios. Además, Los Jaivas alistaron la entrega de todo su patrimonio material a la Universidad Católica para levantar un futuro museo. “No tengo gratos recuerdos de ese show”, sostuvo Francisco Bosco, integrante de la banda. Pero el 25 de marzo de 1988 miles de personas disfrutaron de un gran espectáculo en el Estadio Santa Laura de Santiago.
Esa serie de conciertos fueron las últimas presentaciones con el baterista Gabriel Parra. Tras su muerte, en un accidente automovilístico en Perú, un 15 de abril de 1988, su lugar fue ocupado magistralmente por su hija: Juanita Parra, quien es la baterista hasta el día de hoy. “Esa fue la gira que cambió para siempre nuestras vidas”, indicó la artista.
Los Jaivas, Los Ángeles Negros, Los Galos, Los Golpes y Los Blops, entre otros, son los grupos pioneros del rock chileno, quienes marcaron a muchas generaciones, pero también influyeron en los nuevos artistas que darían vida a la escena local. Los Prisioneros, Los Tres y Los Bunkers, por nombrar a los más trascendentes, tomaron la posta y se inspiraron en la letra y melodía de esas recordadas y sobresalientes bandas.