La literatura e historia musical de Chile cuenta que cuando Jorge González, líder de Los Prisioneros, entró a estudiar al Conservatorio de Música de la Universidad de Chile, uno de sus primeros amigos en esas frías aulas fue Carlos Fonseca. El productor falleció este viernes 06 de octubre a los 62 años tras, según los primeros informes, habérsele detectado hace un tiempo cáncer al riñón.
Tras esa amistad universitaria, Fonseca se convirtió en el principal articulador en la carrera del trío de San Miguel. Y con los años, el productor pasó a ser una figura icónica no sólo de Los Prisioneros, sino que de muchas bandas de Chile. Entre ellas: La Ley, Lucybell, Manuel García, Inti Illimani y Pánico.
Luego del deceso, muchos artistas que trabajaron junto a él le dedicaron sentidos homenajes. Uno de ellos fue Claudio Narea, exguitarrista precisamente de la banda sanmiguelina. “Tuvo la decisión de apoyar desde el comienzo a estos tres chicos de San Miguel, financiando los primeros demos. Luego convenció a su padre de comprarnos instrumentos y nos llevó al estudio para grabar nuestro primer disco. Le quiso llamar La voz de los 80, nosotros estuvimos por titularlo Los Prisioneros. Al final Carlos se salió con la suya”, escribió en su cuenta de Instagram el músico.
Otro de los que relató su aventura con el productor fue Manuel García. “Sin duda un hombre importante en la historia de la música chilena ha partido. Carlos dejará con su memoria un legado enorme de trabajos artísticos de los que él fue impulsor, gestor y también creador. El lugar que la música chilena le ha dado está bien merecido, ganado y acuñado”, relata el cantautor.
Vida en Argentina
Tras vivir en su adolescencia por casi 10 años en Argentina, Carlos Fonseca llegó a Chile a principios de los años 80. En este lado de la cordillera el productor se encontró con un paisaje y una vertiente musical muy diferente a los que había palpado en sus años anteriores. De hecho, en Chile no había cultura melómana.
Tampoco había vida nocturna ni muchos lugares donde los grupos emergentes pudieran presentar sus trabajos. Todo era en la clandestinidad. En una reciente entrevista, el productor cuenta que fue al cine Gran Palace, hoy convertido en un hotel y mall, a ver la obra/documental «Adiós Sui Géneris». Por eso, en el año 1982, Fonseca viajó a Argentina a convencer a Charly García y su manager para visitar Chile, pero el costo monetario de eso ya lo tenía invertido en otro sueño: la disquería.
Junto a la ayuda de su padre, lanzó Fusión, la venta de discos que se convirtió en uno de los lugares más importantes de la época. Con los años, Fonseca siempre estuvo ligado a la producción de música nueva. En 1995, por ejemplo, desde el sello EMI, lideró el proyecto “Nuevo Rock Nacional”, iniciativa esencial para grupos como Los Tetas, Machuca, Pánico, Christianes y Joe Vasconcellos, entre otros.
Una gran pérdida para la música, pero, pensando en positivo, se fue un hombre que deja un legado imborrable para la historia de este arte en Chile. Y como menciona además Claudia Narea en su post: “No basta con el talento en la música. No habría Prisioneros sin la visión, el trabajo y los aciertos de Carlos Fonseca”. Y, claramente, no habría rock chileno sin Los Prisioneros. Desde Piratas del Rock, le dedicamos un ¡muchas gracias por todo!, Carlos. (Foto: Cortesía).
4 comentarios
Buena crónica. Insigne figura de la música nacional.
Buena nota.
[…] sus letras, del altísimo calibre para la época, no dejaron a nadie indiferente. Apoyados por Carlos Fonseca, el trío de San Miguel logró convertirse en una agrupación respetada y, quizás, en la mejor que […]
[…] con el apoyo de Carlos Fonseca, su manager; y Gustavo Santaolalla, el productor del exitoso Corazones, aceptó. Fue quizás uno de […]