La Beriso lo hizo de nuevo. Por más de dos horas, la banda liderada por un emocionado e intrépido Rolo Sartorio llenó de rock y energía la noche del Teatro Cariola, en nueva presentación en Chile. Con 23 canciones, la banda argentina mostró su vigencia y despliegue musical, que dejó contentos a los fans que llegaron al recinto de San Diego.
Pese a una larga espera, si bien antes habían abierto los fuegos el sólido grupo local La Ramona Soy, la impaciencia del público se dejó sentir. Pero tras la introducción compuesto por el tema de Queen, “Rapsodia Bohemia”, a eso de las 21:20, La Beriso comenzó su show con “Creyendo”.
Con gafas oscuras, una gorra negra y un pañuelo que colgaba se su bolsillo trasero, Rolo Sartorio se movía por todo el escenario animando a su fanaticada. “Legui” y “Mano a mano”, fueron las canciones que siguieron en la noche capitalina. Y llegó el primer coro del evento, de la mano del clásico “Madrugada”, donde el líder del grupo dejó que el público vitoreara el tema por minutos.
“Mañana”, “Vamos por la gloria” y “Pensamientos”, fueron las canciones que continuaron en su presentación. Banderas de Chile y camisetas de fútbol argentino no faltaron para adornar una jornada épica. “Cantemos” y “Miro hacia atrás” fueron parte del setlist del grupo.
La décima canción de la noche fue “Cansada”, de su último trabajo Mienten, estrenada hace muy poco, con video incluido, pero que el público ya se sabía de memoria. La voz ronca de Rolo Sartorio le entregó más emotividad a la versión. En “Lo olvido”, un hincha de Deportes Iquique, de la primera división de Chile, le entregó un gorro y una camiseta, que el líder mantuvo por algunos instantes. “Otra noche más”, “Cómo olvidarme”, “3 mujeres”, “No me olvides”, “Traicionero” y un cover final de AC/DC, coronaron una noche llena de rock y energía.
La Beriso mostró lo mejor de repertorio, en un momento único de su carrera, con una muchedumbre que los deleitó y aplaudió en cada momento. Fue tal la euforia de la noche que, casi al final, Rolo Sartorio, trepó al palco para estar más cerca de sus fans. Una noche digna de recordar.